Operaron a mi mascota

 

Operaron a mi mascota

Es muy probable que nuestra mascota necesite una intervención quirúrgica en algún momento de su vida, por ello hay que saber que debemos esperar y como tenemos que actuar. Siempre hay que buscar el profesional idóneo para realizar la intervención. Debe ser un médico veterinario colegiado con experiencia, en el tipo de cirugía que se va a realizar. Ahora que la medicina veterinaria es más especializada, existen médicos veterinarios especialistas en cirugía de tejidos blandos, traumatología, cavidad torácica, etc.

Luego de la cirugía, la mascota se quedara en la clínica en reposo el tiempo que indique el veterinario. Las cirugías más complejas requieren mayor tiempo de internamiento. Durante este tiempo es importante que los dueños visiten a la mascota, sea perro o gato todos los días durante tiempos cortos. No ver al dueño por muchos días puede aumentar la ansiedad en la mascota retrasando su recuperación y si las visitas son prolongadas podría comenzar a moverse demasiado y ser contraproducente. Lo indicado es  dar vistas cortas todos los días.

Luego, cuando la mascota es llevada a casa hay que seguir rigurosamente todas las indicaciones del veterinario, llevarla puntualmente a sus controles y dar las medicinas indicadas (si es que las hubiera). Es muy importante vigilar de cerca a la mascota ya que esta no guardará reposo y apenas se sienta mejor va a querer jugar y correr pudiéndose hacer daño. Tener un número de teléfono para poder contactar a su médico veterinario las 24 horas es indispensable.  Debemos comunicarnos de inmediato con el veterinario si la mascota llora sin parar, no se mueve por mucho rato, no toma liquido ni come por más de 12 horas, la herida sangra, supura o esta húmeda o si  los puntos parecen haberse salido. Todas estas son situaciones en las que no debemos dudar llamar al doctor pero yo siempre pienso que cualquier situación en la que tengamos duda es mejor no correr riesgos y llamar.

Es normal, que en las primeras horas en que la mascota está en casa no quiera comer. Pregunte a su médico veterinario que cosas de las que a él más le gustan y son consideradas dieta blanda podrían ofrecerle.  Deberán tener paciencia e insistir después si al primer intento no quiere comer.

Si la mascota está usando un collar isabelino por ningún motivo se lo quiten, hacer esto es incurrir en una grave negligencia.